Lucha Libre

ESTADIO CALIMAX (TIJUANA, B.C.)
9 DE OCTUBRE 2007

El plazo se cumplió y Tijuana fue testigo de la llamada “Guerra de Demonios”.

En una noche llena de sorpresas y emoción se llevó a cabo esta función que fue calificada como histórica.

El momento de la batalla final había llegado y ante la expectación del público asistente al estadio Calimax, ambos gladiadores hicieron entradas espectaculares. Espectro Jr. fue el primero en arribar al cuadrilátero sorprendiendo a todos: del fondo del parque apareció una carroza fúnebre de la cual sacaron un ataúd entre varios hombres y lo depositaron en medio del ring, para abrirse poco a poco emergiendo de él: Espectro Jr. Cuando todo el público miraba hacia la pasarela esperando al segundo gladiador, en el otro extremo del coso un potente ruido se iba acercando, apareciendo un contingente de motociclistas de Solo Ángeles de Tijuana, quienes a bordo de sus recargadas máquinas escoltaban a Blue Demon Jr. quien ataviado con su clásico equipo y una elegante capa en azul y plata, conducía una moto en dirección al cuadrilátero.

La gente estalló de emoción y de pronto todo se convirtió en un caos de cámaras y público. Así iniciaron las acciones. La lucha sólida y sangrienta… Espectro Jr. tomó ventaja y maltrató a su oponente hasta sangrarlo. Literalmente lo paseo por arriba y abajo del ring. Un par de ocasiones logró las espaldas planas pero no concretó la hazaña. Cuando el panorama era oscuro, Demon sacó fuerzas de flaqueza y apoyado por todo el público retomó las riendas de la batalla cobrándose cada una de las afrentas; Espectro Jr. comenzó a sangrar también y las acciones empezaron a tomar su rumbo definitivo. Demon conectó un tope entre la segunda y tercera cuerda para que ambos gladiadores escucharan la cuenta de Babe Richard casi hasta el final. Al subir, Demon alcanza a amarrar a Espectro con la llave que sellaría su derrota; “la estaca”, exacto obligó al mono verde a rendirse ante la explosión de júbilo en todo el parque. Blue Demon Jr. visiblemente emocionado, con lágrimas en los ojos ofreció al público la tapa que usó por última vez Espectro Jr., dándole las gracias a los asistentes, a Dios y a su padre el querido Profe Manotas, quien hace 36 años logró la misma hazaña.

Así Blue Demon Jr. obtuvo el trofeo más preciado de su carrera en la que sin duda alguna ha sido la batalla más fuerte que ha librado arriba del ring.